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Reconocimento y cariño - Chicos con necesidades especiales




Carta abierta al mundo:


Yo soy el profesor que esta alabando a sus estudiantes en el reciente vídeo viral. 

Me es muy difícil escribir esta carta, asi como quiero mantener la chispa en mis alumnos, pero creo que esta es una extraordinaria oportunidad que no puedo dejar pasar.
Les escribo esta carta muy temprano en la mañana con el corazón llenoo y poco sueño en los últimos días así que por favor disculpen cualquier error.

Siete meses atrás me llegó a un punto de inflexion. Como un profesor de educación especial tengo estudiantes con una variedad amplia de condiciones, pero todos comparten un elemento común; ellos son puros. Representan el amor y todo lo que es bueno este mundo. Pero, sin embargo, parecía como si el 99 % de la sociedad no pudiera ver esto. Uno de los padres, incluso me dijo que su mayor temor era morir y dejar a su hijo solo y sin hogar, deambulando las calles y siendo ignorado como si fueran un "poste de luz".

Yo sabía que tenía que hacer algo. Llame a todos los padres de mis alumnos y les propuse la idea de iniciar una esécie de blog que discutiendo abiertamente cada diagnóstico con acceso a los niños. Estuve plenamente consciente de que eso era fue inaudito y podía causar complicaciones para mi carrera. No me importo. Estos niños merecen ser escuchados, queridos y apreciados. El mundo necesita entender que de muchas maneras, los niños tienen razón. Tenemos que aprender de ellos.

Por lo tanto, dejé de poner dinero en mi cuenta de ahorro. Pongo USD 600 al mes en la publicidad de Facebook. Paso cada dia a partir de las 8am-4pm enseñando y de las 4-10 pm lo dedico a la creación de los videos y  blogs. Apuesto todo a este proyecto. A cuatro meses del proyecto, temerolso le pregunte a mi novia si ella creia que jamás podría hacer impacto, yo ya estaba dispuesto a renunciar. Ella me convenció de para seguir adelante por un año completo y luego tomar una decisión.

Ese video no es un comercial. Tenemos mas de 100 de videos de la misma calidad. Nuestro deseo es difundir el amor, la empatía y la aceptación (sí la aceptación, la conciencia no es lo suficientemente buena) para personas con necesidades especiales. No hay una manera correcta de hacer las cosas.
Así que, voy a decir algo que nunca pensé que diría..... Por favor compartan esto. Esto es realmente una oportunidad para nosotros para hacer una diferencia en nuestro mundo juntos. Estoy temblando escribiendo esto, porque entiendo el potencial de impacto que puede tener como un equipo.

Por favor, por el bien de mis estudiantes y personas con necesidades especiales de todas partes... Haz que este se video que se extendió  por todo el mundo sigua su viaje. Tomter unos minutos de cada día para entender a nuestros estudiantes y amigos.
Todos somos diferentes, pero todos estamos juntos en esto.

Los amo a todos,




El Sr. Chris

Fuente: Special books for special kids

Una boda a los 100 años

Para una novia de Kentucky, la edad no es nada más que un número.
El 6 de febrero, Dana Jackson contrajo matrimonio - en su cumpleaños numero 100.
La centenaria casó con Bill Stauss, de 87 años de edad, en una ceremonia en el Centro de Salud de Rosewood en Bowling Green, Kentucky, donde ambos residen.
"Me siento 50," Jackson dijo BG Daily News. "No me siento 100." Jackson se casó una vez, hace 85 años a la edad de 15.
Al ver a su nueva novia, el novio derramó algunas lágrimas de felicidad. "Ha sido 56 años desde que espere que me suceda a mí", dijo Stauss. "Todo lo que quería era ver de cerca. Cuando la vi de cerca, vi lo hermosa que era."
La pareja se conoció hace dos años en un centro de cuidado diurno para adultos.

Video traducido en español: https://www.facebook.com/La100/videos/1173738532643881/

Fuente: huffingtonpost.com

“Invictus” - William Henley (Inspiracion para Nelson Mandela)


English Version

 

En 1849, en Gloucester nacía William Ernest Henley en Gran Bretaña el poeta y escritor que más de un siglo después inspiraría con sus sentidos versos a Mandela a soportar física y espiritualmente los veintisiete  años de cárcel que este último padeció mayormente confinado dentro de los muros de Robben Island durante el régimen segregacionista del Apartheid sudafricano.


Henley y Mandela han pasado por vivencias  terribles, situaciones devastadoras en las que debieron sobrellevar sufrimientos, dolor, tristeza, desapegos. Ambos convalecieron, y lograron salir con la mirada en alto de esos lúgubres túneles esquirlados en que se les transformó la existencia.  Los golpes que la vida propinó a estos dos hombres -que nunca llegaron a conocerse personalmente- habrían puesto de rodillas a cualquier avechucha  humana débil e implorona de consuelo.

Henley y Mandela ejemplifican el valor de la soberanía  espiritual, y nos legan un modelo de subjetividad capaz de fortalecerse pese a todo horror, pese a la enorme vulnerabilidad en que nos sumergen las arbitrariedades trágicas, pese a la amargura de las pérdidas... pese a todo. Ambos pudieron amparar y proteger dentro de sí mismos una cierta zona intocable. Esa zona interior, ese minimísimo punto de luz abriéndose paso en la cerrazón del desamparo, ese "algo" fue el oasis que lograron sustraerle al poder de las circunstancias adversas y fue lo que jamás entregaron al dominio de nada ni de nadie. Siguieron siendo soberanos de sí pese a padecer los atenazantes modos trágicos de un destino que se ensañaba con ellos duramente. Como si se tratara de "pequeñosgrandes Ulises" flotando entre los agitados y dispersos despojos de una nave abatida bajo la furia de Poseidón, ellos también hallaron heroicidad conectados con ese "algo" inconquistable que seguía respirando libertad y firmeza dentro de su espíritu. Ese "algo" libre y sereno ha sido lo que justamente los volvió "Invictus".

Ahondando en la poco conocida biografía del inglés William Ernest Henley, sabemos que éste había nacido en 1849 en Gloucester (Inglaterra) y fue educado en Crypt Grammar School. El desdichado William supo desde muy jovencito lidiar con el sufrimiento, la minusvalía, la dureza de la enfermedad y la voluntad de recuperación. Debió sobreponerse a una severa tuberculosis artrítica cuyas secuelas lo mantuvieron durante un año recuperándose en Edinburgh. Entre esas secuelas debió pasar, a los 16 años, por la experiencia  terrible de la amputación de una de sus piernas. Mientras Henley trataba de salir adelante de su enfermedad y consecuencias físicas irreversibles fue que comenzó a escribir poemas. Para esa misma época se hizo amigo íntimo de Stevenson, al que su ausencia de pierna inspiró la puesta en escena de John Silver “El largo”. Incluso ambos -Henley y Stevenson- llegaron a escribir en dueto varias obras de teatro.  Fue editor, crítico literario y escritor. William Ernest Henley ha pasado a la historia de la literatura como poeta, particularmente  por un relevantísimo y tremendo poema que estaba incluido en el que fue su último libro, “In Hospital”. “In Hospital” reúne una serie de poemas que fueron publicados en el mismo año de su muerte, la cual ocurrió cerca de Londres en 1903. En este último poemario (cuya temática  está basada en su propia experiencia como paciente internado durante veinte meses entre 1873 y 1875 en el Old Infirmary de Edinburgh) se encuentra “Invictus”, el cual había  sido escrito por el propio Henley en 1875. 
“Invictus” es un poema desgarradoramente sensible. Durísimo por momentos, impresionantemente claroscuro.  
Su intensidad parece, por instantes, querer manifestar la tension ambivalente  de un puño cerrado que golpea, y a la vez clama esperanzadamente a los gritos por un porvenir  mejor,  abierto, extendido en lo alto. Pero por sobre todo es un indiscutible poema que combina la aflicción y la voluntad, un poema dramático, sí, pero “en lucha”, activo, y que recuerda el valor fundamental que posee no perder la fuerza cuando la fuerza misma parece que nos va abandonando. Henley canta a la potencia de ser. Y por encima de todo, reinvindica que pese a toda pérdida, hay algo último y primero que jamás debemos perder: el timón de sí mismo. Ser el amo de nuestra barca siempre, aún en medio de la más arreciante  de las tempestades. 
Un poema para atravesar  tormentas… y trascender tormentos.
Sus versos cargados de dignidad invocan a la voluntad firme que debe hallar un espíritu que se encuentra “tomado” por alguna situación vital cuya aspereza nos impacta de una manera desoladora. Henley esculpe con letras mojadas en tinta de sangre y lágrimas, el sentir de un alma dolorida y por momentos absolutamente aplastada por circunstancias que no logra manejar ni controlar en modo alguno, pero que sin embargo debe ponerse de pie como sea y enfrentar la reconstrucción de su desbaratado destino. En sus versos, Henley junta (como si se tratara de palabras-esferas de mercurio) sus propios pedazos de sufrimiento, sus jirones biográficos, las piezas de sí a las que golpeadamente ha quedado minimizada su identidad. Y se recuerda -como quien enuncia un juramento ante el espejo invisible de su más íntimo sí mismo- que ninguna circunstancia lo doblegará y que, finalmente, podrá imponer su erguida voluntad soberana derrotando los dolores, dominando todo miedo, enfrentando como un nobilísimo guerrero toda garra de soledad que hiera en medio del desnudo pecho, elevándose ante todo ese inenarrable espanto de sentir que el horizonte se ha vuelto terca oscuridad sin salida. 
Henley hace germinar en su poema el destello de saberse poseedor de una potencia salvífica propia, intrapersonal, individual y única la cual ha de mantener despiertas cada día el ansia de libertad y la capacidad de resistencia. Amar la libertad y templar la resistencia,  esos dos son los hilos de oro a los que el alma debe aferrarse en los momentos más desoladores y terribles donde la existencia entera parece ponernos descarnadamente  a prueba. Y con esos hilos de oro se ha de salir del laberinto de Creta habiendo batido los multiformes rostros tanatológicos que asumen nuestros singulares Minotauros deseosos de tomar nuestro pulso hasta extinguirnos...  
No es de extrañar que el poema “Invictus” fuera encontrado por Mandela. 
Los orientales dicen que no encontramos a los objetos, sino que los objetos son los que nos encuentran a nosotros. Este juego de palabras no es en absoluto animista ni banalmente supersticioso, es un modo más de recordarnos que es bien poco lo que surge por acción de nuestra planificación y mucho más lo que sucede desde la lógica del devenir espontáneo de los hechos. Podría ser este un caso ilustrativo en que esa interpretación orientalista cobre plena dimensión, haciéndonos reflexionar acerca de otros circuitos para comprender la dinámica de las búsquedas y los hallazgos. Siendo así, no podría tanto afirmar que Nelson Mandela haya encontrado el poema de Henley como sí me inclino a creer que el poema de Henley encontró la manos de legendario líder sudafricano. Los poemas son cosas tan raras, como suaves "dientes de león" soltados al viento: uno nunca sabe a ciencia cierta adonde pueden ir a parar las pequeñas palabras que vuelan en ellos, y menos aún. qué resultará si llegan a sembrarse en la mirada de aquellos que los lean... los poemas son semillas tan inciertas!  

Este poema fue guía, bálsamo y soporte espiritual de Nelson Mandela mientras pasaba por el encierro,  la humillación y el  cautiverio que conformaron el castigo “blanco” que se le impuso por casi tres décadas de defender sus posiciones antisegregacionistas y haber sido consecuente con su proyecto de lucha inclaudicable contra el racismo y a favor de la libertad. Mandela se leía a sí mismo este poema de Henley cada vez que su alma decaía, cada vez que una nueva circunstancia lo vulneraba inclinándolo hacia la desesperación y la desesperanza. Poesía que amarra la fragilidad de la vida al puerto de la resistencia cuando llega la brutalidad de la tormenta o la inhumanidad de la tortura.

El nombre mismo de este poemazo fue utilizado para titular la última película del gran Clint Eastwood, en la cual se narra la victoria de la selección sudafricana de rugby –los Springboks -durante el mundial de 1995. La historia del film está basada a su vez en el libro de John Carlin “Playing the Enemy: Nelson Mandela and the Game that Made a Nation”.


Este es el poema original de William Henley en inglés y su traducción al español. 

Un poema digno de ser enmarcado  y releído  cuando arrecian épocas de mares agitados, cuando se siente la cercanía  fría del “horror de la sombra”, cuando nos parece inminente el riesgo de la zozobra.




Fuente: Gabiromano.blogspot

Cómo las experiencias de la vida cotidiana modifican el cerebro

Para la ciencia los hechos vividos alteran los circuitos neronales. De qué manera impactan en el órgano más importante del cuerpo. El prestigioso neurocientífico Facundo Manes lo explicó para Infobae

Las neurociencias intentan explicar cómo los hechos que se viven a diario impactan en el cerebro. La experiencia y el ambiente modifican los circuitos neuronales e incluso, los genes.
El prestigioso neurólogo y neurocientífico argentino Facundo Manes, creador del Instituto de Neurología Cognitiva (INECO) y del Instituto de Neurociencias de la Universidad Favaloro, lo explicó para Infobae en su ciclo #CerebrosenRed.
Diversos estudios han demostrado que existe una reorganización de circuitos cerebrales y que además existe una producción de nuevas neuronas en el cerebro adulto. "Uno de los aspectos más fascinantes de la plasticidad -la capacidad de adaptarse a los cambios- se da a nivel de la sinapsis, que es el encuentro entre dos neuronas, o sea, la conexión entre partes de dos neuronas", dijo el experto.
"Cada vez que nos enfrentamos a una situación nueva, hay sinapsis que se fortalecen y sinapsis que se debilitan. Esto quiere decir que cada experiencia modifica nuestro cerebro".
Pero esta neuroplasticidad no sólo existe a nivel de la sinapsis, sino también a nivel de las redes neuronales. "Por ejemplo, si un hemisferio se lesiona el hemisferio intacto puede tomar algunas funciones del dañado", explicó Manes. El cerebro compensa de alguna manera al reorganizar y formar nuevas conexiones.
Es evidente que la plasticidad fue clave en la evolución de las especies y que permitió a los humanos adaptarse al cambio.
La serie #CerebrosenRed propone ir develando estos enigmas con información, estadísticas y documentos exclusivos acerca del funcionamiento del órgano más fundamental de nuestro cuerpo. 
Miles de veces hemos escuchado que determinado hecho ocurrido a una persona le había cambiado la vida, las neurociencias explican que lo que le ha cambiado al vivir ese hecho es nada menos que su cerebro .
A lo largo de nuestra vida, nuestro cerebro va cambiando de manera constante. La experiencia y el ambiente modifican los circuitos neuronales y regulan la expresión de nuestros genes.
Nuestro cerebro es fundamentalmente un órgano adaptativo.
La neuroplasticidad es la capacidad del sistema nervioso para modificarse o adaptarse a los cambios. Este mecanismo permite a las neuronas reorganizarse formando nuevas conexiones y ajustar sus actividades en respuesta a nuevas situaciones o a cambios en el entorno.
La neuroplasticidad rompe, de esta manera, un dogma que existía previamente por el cual se creía que el sistema nervioso era una estructura rígida e inmodificable. Esta creencia postulaba que se nacía con una cantidad de neuronas predeterminada y éstas se conectaban entre sí de una determinada manera para siempre. Este concepto existió durante mucho tiempo hasta que diversos experimentos mostraron que el sistema nervioso tiene la capacidad de modificarse y cambiar incluso en la edad adulta .
Tanto es así, que hoy se ha demostrado que existe producción de nuevas neuronas en algunas regiones del cerebro adulto de distintas especies.
Fernando Nottebohm, investigador argentino que trabaja en Nueva York, probó que el repertorio de cantos de los canarios, que varían según la época del año, responde a los cambios que se van produciendo estacionalmente en distintas poblaciones celulares de su sistema nervioso. Y que esto sucedía porque se generaban nuevas poblaciones de neuronas.
Investigaciones de otro argentino, Alejandro Schinder del Instituto Leloir, aportaron otro concepto importante: estas nuevas neuronas tienen además la capacidad de integrarse exitosamente a circuitos ya existentes y ser funcionales; imitan el comportamiento de las neuronas vecinas y logran así cumplir su misma función.
Existe la neuroplasticidad a diferentes niveles: a nivel molecular, a nivel celular, a nivel de las conexiones de las células del sistema nervioso entre sí (circuitos).
Uno de los desarrollos fundamentales de la plasticidad se da a nivel de la conexión entre las neuronas (la denominada “sinapsis”). La plasticidad sináptica es la capacidad que las neuronas tienen para alterar su capacidad de comunicación entre ellas. Cada vez que nos enfrentamos a una nueva pieza de información que se debe almacenar en nuestra memoria, se generan nuevas sinapsis, se fortalecen otras, algunas se debilitan y otras se podan. Este proceso representa un mecanismo evolutivo fundamental de aprendizaje, presente en organismos básicos como la aplysia (un molusco) y complejos como nosotros.
También evidenciamos plasticidad cerebral a nivel de grandes circuitos: si un hemisferio cerebral se lesiona, el hemisferio intacto puede -a veces- llevar a cabo algunas de las funciones de su par afectado. Esto sucedería porque se desenmascaran conexiones de circuitos neuronales preexistentes pero que eran poco funcionales hasta ese momento.
El cerebro es capaz así de compensar parcialmente el daño, reorganizando y formando nuevas conexiones entre neuronas intactas .
Es evidente que la neuroplasticidad constituyó uno de los principales mecanismos a través de los cuales las especies fueron evolucionando a lo largo del tiempo, adaptándose así a cambios del ambiente más allá de aquello que estaba predeterminado genéticamente. Porque si todo cambia, como dice la canción, no es extraño que también cambie nuestro cerebro.
*Facundo Manes www.facundomanes.com Director del Instituto de Neurología Cognitiva (INECO) y del Instituto de Neurociencias de la Fundación Favaloro. Presidente del Grupo de Investigación en Neurología Cognitiva de la Federación Mundial de Neurología.
Fuente: Diario Clarin e Infobae

Los animales también se suicidan, pero no como creíamos

Hablamos con Orlando Eijo, psicólogo canino, sobre una realidad infestada de leyendas.
Perros que se lanzan al vacío desde balcones urbanos, elefantes que saltan al foso de su jaula, delfines que chocan voluntariamente contra las paredes de la piscina hasta matarse.
¿Se suicidan los animales? ¿Terminan con sus vidas de forma consciente o planificada?
Me lo pregunto mientras marco el número de teléfono de la escuela deOrlando Eijo, un psicólogo canino que trabaja en Argentina y lleva casi 40 años dedicándose a los animales.
Publican la foto inédita de Hachiko, el perro que esperó 10 años a su dueño muertoReal foto de Hachiko, el perro fiel de Japon. Esperó durante casi diez años a su dueño muerto que un día no pudo ir a su encuentro tras fallecer repentinamente. Su lealtad no le permitió moverse desde aquella jornada de la estación de Shibuya en Tokio (Japón) donde su amo, el profesor Eisaburo Ueno, lo recogía diariamente. Fotografía fue tomada en el año 1934 por Isamu Yamamoto
Cuando un perro se instala junto a la tumba de su amo, o le espera hasta morir de viejo, no está mostrando amor. Está enfermo.
Cuando descuelga, oigo aullidos: "Son lobos americanos", me dice, "estarán un rato así".
Eijo no quiere empezar aclarando si el suicidio animal es un mito o una realidad. Decide preguntarme él a mí.
–Si te digo Hachiko, ¿qué piensas?
–¿Es una película de Richard Gere y un perro naranja?
–Muy bien. Está basada en hechos reales. Hachiko, de raza akita, esperó a su amo en una estación de tren hasta que murió de viejo. Su amo había fallecido años atrás. ¿Qué te transmite eso?
–Ternura, amor.
–Supongo que te transmitirán lo mismo los perros que se instalan en los cementerios, junto a las tumbas de sus amos.
–Da lástima, pero supongo que sigue siendo una expresión de amor.
–Ahora sustituye al perro del cementerio por una madre que ha perdido a su hijo y decide irse a vivir al lado de su lápida.
–Diría que la mujer tiene depresión.
–Exacto. Cuando un perro hace eso, no está mostrando lealtad, ni devoción, amor o altruismo. No es bonito, está enfermo, sufre una depresión patológica.
Para Orlando Eijo, el duelo de un perro es muy similar al de los humanos. Y ambos se parecen a las cinco fases de una herida.
"Primero la negación, te cortas y ni siquiera te duele, no de tas cuenta. No es cierto que tu perro haya muerto".
"Después la herida empieza a sangrar, te das cuenta, es cierto que murió, se fue. Entras en la exteriorización, el llanto, la ira".
El perro está tan triste que se cae del balcón, no piensa en irse al otro mundo
"Hasta que el sangrado se detiene. Es entonces cuando el tejido empieza a cerrarse por dentro: la coagulación. El dolor de la pérdida se vuelve hacia adentro y eso te lleva a la culpa, a preguntarte: ¿por qué lo dejé salir? ¿por qué no lo llevé al veterinario?".
"Llega la cicatriz, la tristeza. Así como las demás fases son momentos dinámicos y fuertes, esta etapa te aletarga, te deja quieto, es cuando el tejido se forma de nuevo. A nivel mental, se está reconstruyendo el objeto perdido".
Uno de los estados que puede llevar al suicidio es cuando la tristeza se extiende en el tiempo, cuando no hay reemplazo: "Los perros siempre tienen el recuerdo, pero necesitan un nuevo amigo, u otro dueño, para seguir viviendo. Cuando no lo consigue, la depresión se vuelve patológica, los desequilibra hasta tal punto de llevarlos a la muerte".
–Entonces, ¿pueden suicidarse?– pregunto.
–Se dice mucho eso de que los perros se tiran por el balcón. En realidad está desequilibrado, no mide las distancias, pierde coordinación. Está tan triste que se cae, no piensa en irse al otro mundo.
–Digamos que si el perro está triste, o estresado, dejará de comer, pero no pensará que va a morir por ello.
–Exacto.
Un adolescente deprimido conduce contradirección. No tiene planeado matarse, tampoco seguir viviendo. ¿Es un suicidio?
–Pero, ¿eso no sería una reacción instintiva de autodestrucción? ¿Una especie de suicidio natural?
–Sin planificación no hay suicidio. Los perros tienen metacognición, conciencia de sí mismos. Cuando estamos sometidos a mucho estrés, fatiga, al desastre, en general todos los seres vivos tendemos a hacer cosas totalmente desconectadas de la razón.
–¿Por ejemplo?
–Los lemmings. Estos roedores se reproducen hasta que son tantos que su estrés aumenta y de pronto se produce una estampida. Todos se lanzan a correr y se tiran al mar. No saben por qué corren, se ahogan. Eso reduce la población de forma drástica, baja el estrés y vuelven a reproducirse.
–Qué vida más trágica.
Los lemmings se lanzan a correr y se tiran al mar. No saben por qué corren, se ahogan en masa.
–No es un suicidio colectivo como muchos dicen, es algo que no pueden medir. En realidad, no es muy distinto a lo que hacemos los humanos.
–¿Cómo?
–Un adolescente deprimido, estresado y bajo presión, le da por hacer carreras con el coche y conducir en contradirección. No tiene planeado matarse, tampoco seguir viviendo. Simplemente lo hace. Por una cuestión matemática, puede morir. ¿Es un suicidio?
–Una actitud autodestructiva sí que es.
–El estrés nos conduce al desprecio hacia nuestra propia vida, hacia actividades peligrosas que a veces terminan mal. Mi pregunta es: ¿entendemos bien el suicidio?
–Puede que mucha gente se suicide despacio, de forma inconsciente.
Las situaciones más habituales por las que un perro puede terminar mentalmente enfermo son el hacinamiento, la soledad y la falta de actividad física.
El primero es simple estrés social: "Si tienes muchos perros en un espacio pequeño ocurre como en la prisión, hay miedo de que venga el grandote y te pegue. Es habitual que los perros empiecen a hacer lamida acral, se lastiman las patas o la cola, pueden llegar hasta el hueso".
Una herida que pica, que hay que lamer, es un gran alivio. Es una forma de autolesionarse y entretenerse.
Casi todas las enfermedades psicosomáticas de los perros ocurren porque viven en pisos pequeños: "Están mucho tiempo solos. Eso, la espera, les genera estrés. Tú te vas, pero tu perro se queda y no puedes esperar que esté apagado y encenderlo cuando vuelvas. Por eso una herida que pica, que hay que lamer, es una gran ocupación, un alivio. Es una forma de autolesionarse y entretenerse".
Cuando las perras no hacen suficiente actividad física, su cuerpo se piensa que acaban de parir y se prepara para amamantar.
Las consecuencias más sorprendentes de la falta de actividad física se dan en las hembras: "Ellas siempre están activas, cazando. Solo cuando las crías son muy pequeñas están quietas. Es muy habitual que a una mascota le suba la leche y empiece a actuar como si acabara de parir. Esto ocurre porque estan tan paradas que el cerebro piensa que están en su guarida, y prepara el cuerpo para amamantar".
En la escuela de psicología canina que Orlando Eijo tiene cerca de la ciudad de La Plata se trabaja con lobos americanos y uno ártico. Ellos, que han crecido salvajes, son la fuente de salud mental para los perros que no viven en situación natural, "que hoy en día son casi todos, son mascotas".
Lo más curioso de todo es la terapia, la "terapia musical para perros": son los aullidos de los lobos lo que cura a los perros.
Son los aullidos de los lobos, recordar su propio aullido olvidado, lo que cura a los perros.
"A lo largo de los años hemos ido desarrollando características en los perros que nos fueran útiles, como el ladrido. Pero el ladrido no es bueno para los perros, les estresa y les mantiene constantemente en alerta. El ladrido sale del pecho, es una exalación que se produce por contracción, un ¡BUF!".
Eijo pone como ejemplo de ladrido humano la haka del equipo de rugby All Blacks: "HU, HU, es un grito de guerra". En cambio, el aullido es una exalación larga que proviene del diafragma, como el OOOHHMMMM del yogui.
El aullido produce una vibración que los lobos usan para reequilibrar sus emociones.
"El aullido produce una vibración que los lobos usan para reequilibrar sus emociones. Los perros también lo hacían, pero lo han olvidado por culpa del hombre, porque no nos resultaba útil y nos molestaban mucho". Nuestras mascotas han perdido una de sus principales herramientas para gestionar sus emociones. Ahora, en la escuela de aullidos de Orlando Eijo, 20 perros están recordándolo, afinando su grito profundo, tan necesario para vivir en las selvas de asfalto: "Conocer nuestros recursos y frenar la impulsividad es importante. Tanto los perros y como los humanos enfermamos en las ciudades".
Saber cómo no morir despacio es saber vivir. ¿Cuál sería el aullido humano?
Por: Alba Muñoz, martes 17 de noviembre de 2015
Fuente Playgroundmat.com

La mortal verdad de la soledad

Casi todos nosotros hemos experimentado la soledad en algún momento. Es el dolor que hemos sentido después de una ruptura, tal vez la pérdida de un ser querido, o un movimiento fuera de casa. Somos vulnerables a sentirse solo en cualquier momento de nuestras vidas.
La soledad es comúnmente utilizada para describir un estado emocional negativo que se experimenta cuando hay una diferencia entre las relaciones se desea tener y las que se uno percibe que tiene.
Las sensaciones desagradables de soledad son subjetivas; los investigadores han encontrado la soledad no se trata de la cantidad de tiempo que uno pasa con otras personas o solos. Se relaciona más bien con la calidad de las relaciones, en lugar de la cantidad. Una persona solitaria siente que él o ella no es entendido por los demás, y no puede pensar que tienen relaciones significativas.
Para algunas personas, la soledad puede ser temporal y fácilmente aliviada (como un amigo cercano se aleja, o un cónyuge que cuando regresa a casa después de un viaje de trabajo).Para otros, la soledad no se puede resolver fácilmente (como la muerte de un ser querido o la ruptura de un matrimonio) y puede persistir cuando uno no tiene acceso a conectarse con las personas .
Desde un punto de vista evolutivo, nuestra dependencia de los grupos sociales ha asegurado nuestra supervivencia como especie. De ahí que la soledad puede ser vista como una señal para conectarse con otros. Esto hace que sea poco diferente con el hambre, la sed o dolor físico, que señalan la necesidad de comer, beber o busque atención médica.
En las sociedades ricas modernas, sin embargo, la desactivación de las señales de alarma para la soledad se han vuelto más difícil que las que  satisfacen el hambre, la sed o la necesidad de ver al médico. Para aquellos que no están rodeados de personas que se preocupan por ellos, la soledad puede persistir.
Los investigadores han encontrado que el aislamiento social es un factor de riesgo para la enfermedad y la muerte prematura. Los resultados de una reciente revisión de varios estudios indicaron que la falta de conexión social plantea un riesgo similar de muerte prematura a los indicadores físicos como la obesidad.
La soledad es un factor de riesgo para muchos problemas de salud físicos, de sueño fragmentado y la demencia a reducir la producción cardiovascular.
Algunas personas también pueden ser biológicamente vulnerables a sentirse solas. La evidencia de dos estudios encontró que la soledad puede ser en parte hereditaria.
Múltiples estudios se han centrado en cómo la soledad puede ser el resultado de ciertos tipos de genes combinados con determinados factores sociales o ambientales (como el apoyo de los padres).
Soledad ha sido ignorada como una condición de preocupación en la salud mental. Los investigadores aún tienen que entender plenamente el alcance de cómo la soledad afecta a la salud mental. La mayoría de los estudios sobre la soledad y la salud mental se han centrado únicamente en la forma en la soledad se relaciona con la depresión.
Aunque la soledad y la depresión son parte relacionada, son diferentes. La soledad se refiere específicamente a los sentimientos negativos sobre el mundo social, mientras que la depresión se refiere a un conjunto más general de los sentimientos negativos.
En un estudio que midió la soledad en los adultos mayores en un período de cinco años, la soledad predijo la depresión, pero lo contrario no era cierto.
Soledad Dirigiéndose
La soledad puede ser confundida como un síntoma depresivo, o tal vez se supone que la soledad va a desaparecer una vez que se abordan los síntomas depresivos. En general, la gente se anima a los "solitarios" a unirse a un grupo o hacer nuevos amigos, en el supuesto de que la soledad entonces simplemente desaparecerá.
Si bien la creación de oportunidades para conectarse con otros proporciona una plataforma para la interacción social, aliviando el dolor social no es tan sencillo. Las personas solitarias pueden tener dudas sobre las situaciones sociales y como una presentación de resultado el rechazo de los comportamientos. Estos pueden ser malinterpretadas como hostilidad, y la gente alrededor de la persona solitaria responden en consecuencia. Así es como la soledad puede convertirse en un ciclo persistente.
Un estudio examinó la efectividad de los diferentes tipos de tratamientos destinados a hacer frente a la soledad. Los resultados indicaron que los tratamientos que se centraron en cambiar el pensamiento negativo acerca de otros fueron más efectivos que los que proporciona oportunidades para la interacción social.
Otra forma prometedora para enfrentar la soledad es mejorar la calidad de nuestras relaciones, en particular mediante la construcción de la intimidad con los que nos rodean.Utilizando un enfoque de la psicología positiva que se centra en el aumento de las emociones positivas en las relaciones o el aumento de los comportamientos sociales pueden fomentar las conexiones más profundas y significativas con otros.
De hecho, incluso las personas que han sido diagnosticadas con una enfermedad mental grave han reportado mejoras en su bienestar y las relaciones después de compartir las emociones positivas y haciendo más positivas actividades con los demás. Sin embargo, la investigación con un enfoque de la psicología positiva a la soledad sigue siendo en su infancia.
Seguimos subestimaando la letalidad de la soledad como un grave problema de salud pública.Herramientas contemporáneas, como las redes sociales, mientras que parecen promover la conexión social, favorecer breves interacciones con muchos conocidos sobre el desarrollo de menos pero más significativas relaciones. En este clima, el reto consiste en abordar la soledad y centrarse en la construcción vinculos significativos con los que nos rodean.
La evidencia científica creciente destacando las consecuencias negativas de la soledad para la salud física y mental ya no puede ser ignorada.
La conversación
Michelle H Lim, profesor y psicólogo clínico, Swinburne University of Technology
Fuente:https://theconversation.com/the-deadly-truth-about-loneliness-43785

Cuento - Los maestros

Su nombre era Sra. Riveros mientras estuvo al frente de su clase de 5º grado, el primer día de clase lo iniciaba diciendo a los niños una mentira. Como la mayor parte de los profesores, ella miraba a sus alumnos les decía que a todos los quería por igual. Pero eso no era posible, porque ahí en la primera fila, desparramado sobre su asiento, estaba un niño llamado: Facundo Moreno.

La Sra. Riveros había observado a Facundo desde el año anterior y había notado que él no jugaba muy bien con otros niños, su ropa estaba muy descuidada y constantemente necesitaba darse un buen baño. Facundo comenzaba a ser un tanto desagradable. Llegó el momento en que la Sra. Riveros disfrutaba al marcar los trabajos de Facundo con una fibra roja haciendo una gran X y colocando un cero muy llamativo en la parte superior de sus tareas.
En la escuela donde la Sra. Riveros enseñaba, le era requerido revisar el historial de cada niño, ella dejó el expediente de Facundo para el final. Cuando ella revisó su expediente, se llevó una gran sorpresa.
La Maestra de primer grado escribió: “Facundo es un niño muy brillante con una sonrisa sin igual. Hace su trabajo de una manera limpia y tiene muy buenos modales... es un placer tenerlo cerca".
Su maestra de segundo grado escribió: “Facundo es un excelente estudiante, se lleva muy bien con sus compañeros, pero se nota preocupado porque su madre tiene una enfermedad incurable y el ambiente en su casa debe ser muy difícil".
La maestra de tercer grado escribió: "Su madre ha muerto, ha sido muy duro para él. El trata de hacer su mejor esfuerzo, pero su padre no muestra mucho interés y el ambiente en su casa le afectará pronto si no se toman ciertas medidas".
Su maestra de cuarto grado escribió: “Facundo se encuentra atrasado con respecto a sus compañeros y no muestra mucho interés en la escuela. No tiene muchos amigos y en ocasiones duerme en clase".
Ahora la Sra. Riveros se había dado cuenta del problema y estaba apenada con ella misma. Ella comenzó a sentirse peor cuando sus alumnos les llevaron sus regalos del dia del maestro, envueltos con preciosos moños y papel brillante, excepto Facundo. Su regalo estaba mal envuelto con un papel amarillento que él había tomado de una bolsa de papel. A la Sra. Riveros le dio pánico abrir ese regalo en medio de los otros presentes. Algunos niños comenzaron a reír cuando ella encontró un viejo brazalete y un frasco de perfume con solo un cuarto de su contenido. Ella detuvo las burlas de los niños al exclamar lo precioso que era el brazalete mientras se lo probaba y se colocaba un poco del perfume en su muñeca. Facundo Moreno se quedó ese día al final de la clase el tiempo suficiente para decir: “Sra. Riveros, el día de hoy usted huele como solía oler mi mamá". Después de que el niño se fue ella lloró por lo menos una hora.
Desde ese día, ella dejó de enseñarles a los niños aritmética, a leer y a escribir. En lugar de eso, comenzó a educar a los niños.
La Sra. Riveros puso atención especial en Facundo.

Conforme comenzó a trabajar con él, su cerebro comenzó a revivir. Mientras más lo apoyaba, él respondía más rápido.
Para el final del ciclo escolar, Facundo se había convertido en uno de los niños más aplicados de la clase y a pesar de su mentira de que quería a todos sus alumnos por igual, Facundo se convirtió en uno de los consentidos de la maestra.
Dos años después, ella encontró una nota debajo de su puerta, era de Facundo, diciéndole que ella había sido la mejor maestra que había tenido en toda su vida.
Cinco años después por las mismas fechas, recibió otra nota de Facundo, ahora escribía diciéndole que había terminado el secundario siendo el tercero de su clase y ella seguía siendo la mejor maestra que había tenido en toda su vida.
Cinco años después, recibió otra carta que decía que a pesar de que en ocasiones las cosas fueron muy duras, se mantuvo en la escuela y pronto se graduaría con los más altos honores. Él le reiteró a la Sra. Riveros que seguía siendo la mejor maestra que había tenido en toda su vida y su favorita.
Cuatro años después recibió otra carta. En esta ocasión le explicaba que después de que concluyó su carrera, decidió viajar un poco. La carta le explicaba que ella seguía siendo la mejor maestra que había tenido y su favorita, pero ahora su nombre se había alargado un poco, la carta estaba firmada por Dr. Facundo Moreno
La historia no termina aquí, existe una carta más que leer, Facundo ahora decía que había conocido a una chica con la cual iba a casarse. Explicaba que su padre había muerto hacía un par de años y le preguntaba a la Sra. Riveros si le gustaría ocupar en su boda el lugar que usualmente es reservado para la madre del novio, por supuesto la vieja maestra aceptó y adivinen...
Ella llegó usando el viejo brazalete y se aseguró de usar el perfume que Facundo recordaba que usó su madre la última Navidad que pasaron juntos.
Se dieron un gran abrazo y el Dr. Moreno le susurró al oído, "Gracias Maestra, por creer en mí. Muchas gracias por hacerme sentir importante y mostrarme que yo puedo hacer la diferencia".

La Sra. Riveros con lágrimas en los ojos, tomó aire y dijo, “Facundo, te equivocas, tú fuiste el que me enseñó a mí que yo puedo hacer la diferencia.
"No sabía cómo educar hasta que te conocí".

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(Autor Desconocido) Comparte si piensas que la historia puede ser de utilidad para hacer de este mundo un lugar más humano y sensible al dolor y los problemas de los demás.

Frases - Todavia falta ...

El mecanismo que controla la decepción en el cerebro

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La decepción puede llegar tanto por pequeños contratiempos en la vida como por grandes desgracias; sea como fuere, todo se origina en el interior del cerebro. Ahora, una nueva investigación liderada por la Universidad de California en San Diego (EEUU) ha identificado la parte exacta del cerebro que controla el procesamiento de la información tanto emotiva como sensorial que provoca que nuestro estado de ánimo cambie.

Para su investigación, los científicos realizaron un experimento con ratones, descubriendo que las neuronas que se conectaban al área del cerebro llamada habénula lateral, producían tanto el glutamato (un neurotransmisor excitatorio) como el GABA (un neurotransmisor inhibitorio). Las neuronas son las encargadas de producir estos mensajeros químicos, pero lo común es ver que liberan uno u otro, no los dos. Sin embargo, esta zona del cerebro sí lo hace.

“Nuestro estudio es uno de los primeros en documentar rigurosamente que la inhibición puede coexistir con excitación en una vía cerebral. En nuestro caso, parece que esa vía apunta a la decepción”, afirma Steven Shabel, coautor del estudio que recoge la revista Science.

Posteriormente los investigadores administraron a los roedores un antidepresivo para elevar los niveles de serotonina de su cerebro, por lo que sus niveles relativos de GABA aumentaron, confirmando finalmente que la región de la habénula lateral es parte de la llamada “ruta de la decepción”. Los experimentos con primates dieron igual resultado.

“La idea de que algunas personas ven el mundo como un vaso medio vacíotiene una base química en el cerebro. Lo que hemos encontrado es un proceso que puede amortiguar la sensibilidad del cerebro a los acontecimientos negativos de la vida”, afirma Roberto Malinow, coautor del estudio.

Este descubrimiento podría ser muy útil en el futuro tratamiento para tratar trastornos del estado de ánimo tan graves como la depresión, así como un paso más para desentrañar cómo registra el cuerpo humano los sucesos negativos de la vida.

“Nuestro estudio sugiere que una de las formas en que la serotonina alivia la depresión es reequilibrando el procesamiento cerebral de los eventos negativos de la vida con el equilibrio de glutamato y GABA en la habénula. Ahora podemos tener una explicación neuroquímica precisa de por qué los antidepresivos hacen que algunas personas sean más resistentes a las experiencias negativas”, concluye Shabel.

Autor: Sarah Romero
Fuente: Muy interesante